Filipenses 2:3-4
No hagáis nada por ambición egoísta o vanagloria. Más bien, con humildad, valorad a los demás por encima de vosotros mismos, sin mirar a vuestros propios intereses, sino cada uno a los intereses de los demás.
Perspectivas de las Escrituras
¿Quién te viene a la mente cuando piensas en alguien en tu vida que antepone constantemente los intereses de los demás a los suyos propios? Me imagino que la persona en la que estás pensando te ha inspirado y animado a lo largo de tu viaje por la vida y que Dios la ha utilizado para extender la compasión y el amor a innumerables personas a lo largo del camino. El impacto que podemos tener en los demás cuando ponemos en práctica este principio en nuestras vidas es realmente profundo.
El reto que todos debemos aceptar es que, en lugar de ser consumidos por nuestro propio egoísmo y orgullo, estamos llamados a velar por las necesidades de los demás. Si estamos dispuestos a poner en práctica intencionadamente esta actitud de humildad y compasión en nuestra vida cotidiana, podremos cumplir plenamente nuestro propósito y ser una verdadera bendición para nuestras comunidades.
Tenemos la oportunidad de influir profundamente en las vidas de quienes nos rodean. ¿Qué te vendrá a la mente cuando otros piensen en ti?
Oración de hoy
Dios, te damos gracias por la compasión y el amor que nos tienes. Abre nuestros ojos a las necesidades de los demás y ayúdanos a ser hoy una bendición para nuestras comunidades.
-Tim Fisher
Pastor principal, Crossroads Community Church (Indiana)
